martes, marzo 21, 2006

El estado de las cosas


Están así, a ocho días vista de pirármelas por la puerta grande, las cosas se ponen interesantes en el curro. Una opa sanitaria hostil se está levantando alzando banderas de reivindicación. Es gracioso sentir que ya no importa, ni siquiera interesa el desenlace ni siquiera interesa el desarrollo.
Lo que sí me importa es cumplir mi pequeño sueño, el viaje, la estancia, el conflicto, el aprendizaje. El viaje interno y externo, la tierra y el cielo. En medio, un narciso amarillo que mira al agua para ver su reflejo.
Estando en el gimnasio, he tenido medio insight. Me visualizaba como una célula rodeada de otras en un órgano. Sabía lo que necesitaba y me sentía feliz siendo lo que era, sin necesidad de aparentar u ocultar algo. Entonces me he dado cuenta de lo que soy y de cómo actúo, de la belleza de las cosas simples, de la naturaleza y de todo lo que me rodeaba en ese instante. La cinta sin fin acabó y yo, entrando a la sala de Pilates, tenía que hablar con alguien. Estímulo-respuesta, excitación-satisfacción. Así lo he hecho. Así se hará.

1 Comments:

Anonymous Anónimo said...

Expléndido pues, el estado de las cosas y el narciso. Tranquila quedo.

12:05 p. m.  

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